El factor cancha en el mundial

En los últimos 10 años se han disputado 5 mundiales, por orden: Croacia 2009, Suecia 2011, España 2013, Catar 2015 y Francia 2017.

Este dato, a priori no muy destacado, es importante para comprender la importancia de jugar en casa. En la fase de grupos, en especial los partidos inaugurales de las co anfitrionas, el Alemania contra Corea en Berlín y el Dinamarca contra Chile en Herning. Hemos podido ver el lleno en las taquillas de los pabellones, con capacidad para más de 12.000 personas.

Si miramos la historia, en el 2009 la anfitriona, Croacia, fue vencida en la final ante una esplèndida Francia, igual que le pasó a Catar, a domicilio, en el 2015. Los claros vencedores de hacer el mundial en casa fueron España en 2013, que se alzó el oro en lo alto del Sant Jordi ante Dinamarca, igual Francia en el 2017. Por contra a todo esto, en el 2011, Suecia quedó eliminada por la lucha del oro pero logró un gran hito, luchar por el bronce, partido que tampoco ganó, quedando en un gran 4º puesto.

Este año, tenemos un mundial presentado por dos grandes naciones, ambas están en diferentes semifinales, sólo dependerá de su suerte, o preparación, luchar en la final. La profecía se materializará en unas horas.