El ‘Spanish Vardar’, a la final
La segunda semifinal (26-25) se decidió con un gol de Luka Cindric a falta de cuatro segundos.
Se antojaba igualado el partido y así lo fue. En una Final Four no existen favoritos y la experiencia suma pero no es suficiente. Así quedó demostrado en el Lanxess Arena, en el que el novato Vardar eliminó al FC Barcelona Lassa tras un partido luchado hasta el final.
Empezó el partido con buen juego azulgrana. Llegaban los goles y el equipo respondía. Parecía que la experiencia azulgrana iba a marcar la batuta del partido. Con tres goles arriba, los de XaviPascual encaraban la semifinal con tranquilidad; sin pausa pero sin prisas. Controlaban los catalanes el marcador pero el partido empezaba a cambiar. Y es que, excepto en los primeros compases del partido, el FC Barcelona no ha conseguido superar la defensa macedonia, y mucho menos a un ArpadSterbik inspirado. En defensa, los contrataques del Vardar acababan por desestabilizar a los azulgrana, que dominaron el partido hasta el 13 -12; momento en que el Vardar se situaba por delante en el marcador por primera vez.
A partir de ahí lucha, sudor y nervios. Las porterías respondían y mantenían el encuentro vivo. Sin embargo, el Vardar, que había reservado a algunos de sus mejores jugadores para el final del partido, tomaba la iniciativa del encuentro. Dujshebaev y Cupic, con siete goles cada uno, decidían ponerse el equipo a la espalda y sacar adelante el partido. Así fue como, reanudada la segunda parte, el Vardar se ponía dos arriba en el marcador (19-17). Pero no había nada decidido porque el FC Barcelona, con Lazarov a la cabeza, remontaba el partido y mantenía las esperanzas hasta el final. Fueron seis goles los del macedonio del conjunto catalán, la mayoría de ellos en último tramo del partido, cuando el billete a la final estaba realmente en juego.
La ardua defensa de los macedonios impedía al FC Barcelona llegar con facilidad a la portería rival. Circulaban el balón los catalanes, pero los espacios no se abrían y si lo hacían aparecía Sterbik bajo palos. Fruto de ese trabajo se desprenden los datos anotadores de los azulgranas: tan solo un gol de Víctor Tomás y cuatro de ValeroRivera, pero desde los 7 metros. La defensa macedonia, las paradas y las pérdidas de balón llevaban el encuentro a un final de infarto. Un penalti del Vardar ejecutado por Cupic situaba a los macedonios un gol arriba a falta de tres minutos para el final. Los aficionados de ambos equipos se llevaban las manos a la cabeza. Pequeños detalles iban a decidir y la pizarra iba a ser importante. Y vaya si lo fue.
A treinta y ocho segundos para el final Xavi Pascual pedía tiempo muerto para lograr el empate. Cumplía y marcaba Lazarov, que en su última Final Four con el FC Barcelona supo llevar las riendas del equipo a la perfección. Pero aún quedaban más de veinte segundos, todo un mundo. Y fue entonces cuando Cindric se convirtió en el héroe de la tarde, anotando su cuarto gol en el último suspiro. Un gol que vale una final y que hace historia puesto que gracias a él el Vardar jugará mañana contra el Paris Saint Germain su primera final de la EHF Champions League.